miércoles, 15 de septiembre de 2010

Strauss Kahn; Un socialista como director gerente del FMI



Andan los dos secretarios generales de CCOO y UGT enfadados con las declaraciones en Oslo de Dominique Strauss Kann, al que acusan de hipócrita. También había razones mas que evidentes para estar enfadados con Zapatero en su intento de reordenar, remodelar, reformar… No pienso seguir buscando verbos con los que definir la tentativa del presidente en relación con las cifras del desempleo, háganlo ustedes. Ustedes sabios lectores sabrán que verbo poner y seguramente pondrán tantos como cristales de color diferentes o dioptrías puedan tener las gafas de cada uno.

Los sindicatos mayoritarios no necesitan de los ataques de los dirigentes del PSOE por la convocatoria de la huelga porque éstos, respetuosos con el derecho sindical, para nada se meten en esa decisión, nadie del gobierno y aledaños la critica; El gato escaldado del agua huye. Prudencia táctica.

Ahora es la derecha y sus medios. Después de meses, que digo meses, años, en los que los altavoces de la derecha criticaban el papel subordinado de los sindicatos con el gobierno ahora nos vienen con otra. Era previsible. Pues bien, ya la han convocado. Ahora resulta que los señores de la derecha se vuelven con saña y descalificaciones de todo tipo no solo contra los dirigentes si no también contra toda los cuadros medios, el conjunto de la afiliación y la existencia de los sindicatos. Es una ofensiva en toda regla contra los sindicatos. Querían que se convocara una huelga pero no quieren que los sindicatos salgan fortalecidos de la misma.

No critico la convocatoria de huelga. Todo lo contrario, la política liberal, digo bien, liberal del gobierno y el recorte de derechos de los trabajadores solo puede ser contestada con una huelga general.

Pero a lo que íbamos, las declaraciones de Strauss Kahn no son hipócritas como denuncian los dos secretarios generales, son declaraciones políticas, estrictamente políticas que deja traslucir el estado de la izquierda, las contradiciones de cierta izquierda.

El director gerente del Fondo Monetario Internacional, el francés Strauss Kahn es miembro del Partido Socialista Francés, un significado miembro, diputado y vicealcalde de una población hasta hace poco. También fue ministro de economía. Pues bien, este señor aspira a ser presidente de Francia y pugnar en las primarias, si las cosas se dan bien, con Aubry y Royal. Miembro activo de la tendencia Socialismo y Democracia, una de las tantas que hay en el PSF.

Es uno mas de los muchos ejemplos mas que podemos observar en los comportamientos de la política “socialista” hecha por los no socialistas. Strauss Kahn si quiere disputar la presidencia de la república tiene que manifestar esa actitud “compasiva” con los que sufren. Decía que es uno de los ejemplos porque hay muchos mas. Diariamente en nuestro país estamos viendo lo mismo. El discurso no se compadece con la práctica.

¿De donde sale todo esto? Tengo mi opinión al respecto. Pienso que esa profunda grieta que existe entre el nombre, en ocasiones el discurso y la práctica radica en la falta o inoperancia de controles internos. Si hablásemos de democracia de calidad y no tan solo de la nominal – las primarias sería un acercamiento a la democracia de calidad – podríamos concluir que la democracia sería de mas calidad en cuanto mas se aleje de los sistemas representativos piramidales y por el contrario, de mayor cuanto mas se acerque a la democracia directa sin que por eso suponga que se sea inmune a la demagogia y el engaño en muchos planos de la democracia directa.

El segundo aspecto que quiero mencionar es el problema que se viene dando en la izquierda. A la izquierda actual no la conoce ni la madre que la parió. Tomemos la famosa frase de Alfonso Guerra para definir el estado actual ¿Han cambiado las condiciones objetivas? ¿Han cambiado los mecanismos de explotación que dieron lugar a las formaciones políticas que se reclamaban de izquierdas? Según vemos como marcha la economía y la situación de las clases oprimidas, antes obreras y campesinas, podríamos decir que no. Nada de eso. Existe mayor cobrtura social, desde luego, pero es algo que ahora también está siendo cuestionado.

¿Qué ha cambiado entonces? Han cambiado las políticas que se hacen en nombre de la izquierda y que no atiende, en lo fundamental, a las necesidades que sienten como propias esas clases. De ahí, las desafecciones que despiertan los socialistas cuando gobiernan en el Estado una vez que han perdido el impulso inicial. Coincidente casi siempre esa pérdida cuando se agotan o quedan muy mitigadas en su relevancia las políticas de modernización, de agiornamiento en lo social y en lo referente a los equipamientos colectivos. Siempre es impulso inicial obedece a una carrera por equipararse a otros paises, gobernados por la derecha o la izquierda, de nuestro entorno.
Lo que ha venido salvando a los socialistas en el poder ha sido siempre la ceguera de la derecha nacional que se encuentra a grandistancia de lo que habitualmente hace la derecha civilizada.
Al PSOE le bastaba reproducir esas políticas europeas para significar su "izquierdismo"
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En una de mis entradas, En el calor del verano I y II exponía de modo tangencial una hipótesis que acompañaba de una denuncia. ¿Existen condiciones objetivas para un cambio en un período marcado por una crisis profunda y que esta llevando a gran parte de la población a situaciones de pobreza? ¿Hay un sujeto activo que pueda propiciar el cambio? De lo primero podemos decir que si. De lo segundo podríamos decir que sí, si ese sujeto activo pudiese tener voz. Añadía otras reflexiones sobre el papel que juega en los partidos autodenominados obreros y la mentalidad pequeño-burguesa de sus dirigentes. ¿Verdad que suena a antiguo?
Los que sufren por causas económicas en las sociedades de mercado y capitalistas no tienen voz. Mínimamente pueden estar representados por los sindicatos porque sabido es, que durante un cierto tiempo los altos niveles de paro no tenían una audiencia significativa en la estructura sindical y que esta solo se ha movido convocando una huelga general cuando los derechos de los que trabajan o cobran pensiones se han visto alterados.

Para mi el sujeto activo sigue siendo la clase obrera. Sobre esto habría mucho que discutir. Existe la tendencia en seguir considerando a la clase obrera según criterios de clasificación muy propios de la sociedad industrial e incluso, los que posteriormente utilizaron Bell, Giddens y Gouldner tampoco recogen en su extensión una realidad difícil de fijar. No cabe considerar clase obrera tan solo a los que emplean las habilidades manuales. Clase obrera en su definición como sujeto activo de cambio son también los trabajadores dependientes de la industria, del campo, de los servicios y en general todos los parados. El trabajo ha cambiado, eso es incontestable, ha sufrido una metamorfosis (Gorz) y hay que seguir buscando como poner la razón económica al servicio de una sociedad en la que se persigue la emancipación y el libre desarrollo de las personas tal como ese sociológo decía.

La pregunta es: ¿Cómo es posible que puedan ser únicos gestores del cambio aquellos que no siendo sujetos activos y no padeciendo en carne propia la explotación obran y diseñan políticas en nombre de los explotados? ¿Si son las condiciones las que crean la conciencia y es una determinada conciencia la que impulsa a la acción como pueden, los actuales gestores, ofrecernos situaciones de cambio cuando ni padecen ni sienten en toda su extensión las condiciones de vida generadas por el capitalismo? ¿ Se puede hacer una sociedad igualitaria en la que el hombre y la mujer partciipen de pleno derecho sin que la mujer acceda a los ámbitos donde se puede impulsar el cambio? ¿Se puede hacer una política en nombre de los explotados y los marginados sin que estos estén presentes en los ámbitos donde hay que impulsaqr los cambios?¿No nos recuerda todo esto al “todo en nombre del pueblo, pero sin el pueblo”?

Seguiremos abundando en el mismo asunto en otra entrada, la actual ya me parece demasiado amplia. Creo que la desafección en la izquierda radica no solo en la inexistencia de representantes de clase en los partidos de “clase”, también obedece a la permanencia de hábitos y conceptos que gravitan sobre personas, organizaciones y políticas, pero de eso, ya hablaremos en otra entrada.

Este asunto también han sido tratados por el Sr.M, Manuhermon, y Javier Caso


1 comentario:

  1. Esta autodenominada izquierda que padecemos sólo aspira a gestionar el capitalismo,de tal forma que sus políticas económicas deban ser de corte neoliberal.No tienen salida porque han aceptado ser meramente sujetos pasivos de un capitalismo atroz que atropella y destruye todo rastro del antiguo 'obrerismo'.No se puede peir más a esta gestora capitalista por que su ideario no va más allá que ocupar el poder y gestionar, como le dejen,el capital.

    Ahora debemos hablar de lo trabajadores.Éstos,desde que han alcanzado un cierto nivel de bienestar,han renunciado a sentirse obreros en el término más clásico y etimológico de la palabra.Y es por ello que han caído en las garras del consumo capitalista y no se consideran obreros de la pluma,de la máquina en cadena,de la peonada.

    Todo está sometido a revisión:la conciencia obrera y de clase y sus verdaderos representantes(sindicatos y partidos políticos)

    Hemos perdido nuestra conciencia de clase y perdida ésta se pierde la exigencia una verdadera izquierda que vele,asuma,gobierne y pelee por su bienestar.

    Termino diciendo que se necesita reiventar en este mundo globalizado y muy moderno el sentimiento de clase y la aparición de las nuevas formaciones políticas dispuestas a asumir los roles traicionados por formaciones en cuyo discurso se alardea de los clásicos postulados de la izquierda universal.

    Siento el comentario tan largo.

    Saludos

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