viernes, 14 de mayo de 2010

Desde mi sillón en un viernes a la tarde




Asisto a la sucesión de imágenes que la pantalla me ofrece sobre la suspensión del juez Garzón. Busco y rebusco aquellas foto de la que guardo un vago recuerdo en la que se veía a Belloch en el centro , Maria Teresa a la izquierda y Margarita a la derecha. La necesito pero el tiempo, han pasado ya dieciseis años, ha borrado toda huella.

Lo de Garzón data de aquella, lo de Varela con Garzón viene mas o menos de allí. Soberanía popular ese es el concepto clave sobre el que se asienta la democracia. Es el pueblo el que vota y otorga una representación a una serie de ciudadanos para que ejerza el poder en nombre del pueblo. La justicia emana del pueblo, eso dice la constitución.

Dos poderes, que se han pasado al pueblo, al pueblo trabajador por el forro. En esta negra semana, Piniella nos habla del despertador e indirectamente del tiempo al revés y de las respuestas en su blog, en esta semana negra decía, de bajada de la bolsa, los ricos, los poderosos hace ya tiempo que huyeron de la bolsa, fueron, han sido, los que han provocado las recientes caídas. Hay muchos jubilados que mantienen sus pequeños ahorros en las telefónicas, en los bancos, en las eléctricas y estas sencillas personas han visto como ese ahorro complementario ha desaparecido o esta en vías de desaparecer. Es la semana de quitarse la careta y el pañuelo que alegremente se exhibía en la fiesta de los mineros en Rodiezno. Desaparecen esas imágenes, con las que siempre he sentido un repelús especial, del mitín abrazando a los candidatos y todos vestidos de sport pero con elegancia y calidad, las banderitas rojas... ¿Porqué siguen utilizando un color al que vienen mancillando reiteradamente? ¿Porqué Maria Teresa en esta misma semana se viste de rojo al igual que en el día de la mujer se vistio de morado o lila? ¿Qué pretende decirnos? ¿De qué va?

Cierro las interrogantes. Si, desaparecen esas imágenes de agitar las banderitas, los jóvenes sentados detrás de los oradores, las sonrisas y los abrazos. No, en mi nombre no. No con mi historia que es mía y de aquellos que en las mayores de las dificultades defendieron y arriesgaron.

Ahora me entero de que los sindicatos, UGT en concreto, dice que no van a hacer el juego a nadie y que la huelga general son palabras mayores. Treinta y siete años de militancia sindical y en responsabilidades regionales y estatales impulsan la sonrisa amarga que en estos momentos tengo.

¿Bajo que paraguas se protegeran los pobres de esta España? ¿Quién y quiénes les ampararan a partir de ahora?

Nos queda la liga y luego el mundial. Este pueblo, el mas dormido del mundo, el mas enajenado del mundo, el que mas espera siempre del poder en el mundo, seguro que no les defraudará, pueden permanecer tranquilos.

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