Money, money money… En Cabaret, película de 1972 dirigida por Bob Fosse e interpretada por Liza Minelli, Joel Grey y Michel York se narraba la descomposición de la sociedad alemana y el ascenso del nazismo. Quién no recuerda esa maravillosa canción interpretada magistralmente por Joel Grey y Liza Minelli. Seguramente la recordaran. La canción debería de servir de banda sonora a esta entrada que trata de la íntima relación entre política y dinero.
Gürtel en Castilla y León.
La cadena SER se hace eco de un informe policial que el juez Pedreira, instructor del caso Gürtel, ha remitido a la fiscalía anticorrupción. La bola de mierda crece y se expande. Va más allá de Valencia, más allá de Madrid. Ahora están ya bajo los ojos de la justicia dos personas en Castilla y León; El presidente de las Cortes y antiguo consejero de Fomento, Fernández de Santiago y Silvia Clemente Consejera de Agricultura que según informa esa cadena radiofónica podrían ser, ambos, sospechosos del cobro de comisiones.
Cuál será el impacto de confirmarse esta noticia en el electorado castellano-leonés. Previsiblemente sería algo muy diferente al que despiertan en otras regiones noticias similares. Castilla y León es algo diferente de Valencia y Madrid. El encogerse de hombros no funciona tanto aquí, porque la construcción en esta zona no ha tenido una especial incidencia en la riqueza de la región y además, porque aquí los políticos son seres que están siempre bajo sospecha sean del partido que sea. De confirmarse la noticia, muchos votantes de Partido Popular acabarían por abstenerse. Es difícil que el PSOE pudiera salir beneficiado por transferencia de votos debido a otras múltiples causas.
Un brindis al sol
Sarkozy y Zapatero, Zapatero y Sarkozy. Tanto monta, monta tanto… Hay que ver como coinciden estos dos! Al alimón dicen en la ONU que van a proponer al G-20 una tasa sobre las transacciones financieras internacionales. Zapatero es un replicante de Sarkozy. Dos expertos en economía financiera, uno muy cercano al PSOE y otro independiente vaticinan: Es un brindis al sol, difícil de llevar a cabo por que no todas las transacciones económicas, un billón doscientos mil millones de dólares diarios, se llevan por procedimientos transparentes y porque entre otras cosas, el régimen “comunista” chino (el entrecomillado es mío)se opone. Los expertos son Emilio Ontiveros y Juan Mascareñas, Catedrático este último de Economía Financiera de la Universidad Complutense de Madrid. Los dos mandatarios necesitan un lavado de imagen como el comer, proclamaron la buena nueva entre el bostezo y la indignación de los representantes de los países pobres que les escuchaban en Naciones Unidas y que están hasta el gorro de que se les tome el pelo a base de constantes promesas incumplidas.
Unas propuestas, todos lo deberíamos de saber, que están destinadas exclusivamente al consumo doméstico. No es nada nuevo, se ha llevado otras veces al G-20 sin convicción y sin fuerza y siempre ha fracasado y la proponen por eso, porque saben que va a fracasar. En Francia y España el coro de los incondicionales agitarán este globo para revitalizar a unos líderes, que a estas alturas del juego, carecen de credibilidad en sus propios países y en Europa. Veinticuatro horas después el presidente español se dio una vuelta por Wall Street para rendir cuentas ante quienes pusieron de rodillas a España, antes los mismos que le “sugirieron” un capítulo de reformas que provocaran una mayor pobreza entre trabajadores y los pensionistas españoles.
Vela de armas
No todo aquel que persigue un cargo político tiene intereses pecuniarios. No sería justo por mi parte atribuir a eso la vocación política. Cuando alguien quiere promocionar en política lo hace también por otras causas. La ambición responde a egos inquietos, la búsqueda de poder, el servicio a una idea, a los ciudadanos… En fin, muchas otras cosas.
Pero también sería hipócrita e ignorante si me creyera y diese por buena la explicación que casi todos los vocacionales hacen de que están ahí para prestar un servicio a los demás. El dinero mueve también la vocación política. No se como estará ahora lo de la cuota obligatoria en los partidos para los cargos públicos, lo que habitualmente se llama “impuesto revolucionario”. Desconozco al día de hoy como está ese asunto en el PSOE y mucho más en el PP. Sin embargo pienso que en Izquierda Unida es diferente y hay un mayor rigor en lo de las contribuciones a los colectivos de los cargos públicos. Recuerdo de mi pasado como responsable orgánico lo complicado que era el que algunos ingresaran su cuota adicional por ser cargo público y no digamos, el zafarrancho que se solía montar cada vez que se trataba de incrementar un punto o dos la cuota.
Sobre las retribuciones a los políticos se suele decir que hay que pagarlos bien para que estén contentos y no metan la mano en lo del común. Se argumenta que es mejor que estén bien pagados para evitar el que traten de resarcirse por otros medios no lícitos. Algunos como podemos ver no tienen suficiente. Con estos argumentos los defensores del cobro suficiente dan indirectamente la razón a aquellos que desconfían los políticos.
No se pone en cuestión que los políticos cobren. También yo cobré. Lo que quiero decir es que muchas, mas de la que quisiéramos, vocaciones políticas son alentadas por el muy pedestre deseo de la mejora de una situación económica.
Es tiempo de pactos en las oscuras trastiendas, de mesa y mantel. La cocina está a pleno rendimiento. Se nota en la red, se nota en las ondas, se nota en los periódicos y se nota en la barra del bar. Los que aspiran guardan un prudente silencio, no hablan de temas controvertidos. Los ojos del poder todo lo abarca y no es cuestión de poner en peligro lo que tanto trabajo está costando conseguir. La cara amable, morderse la lengua, el gesto comedido y la alabanza a tiempo es lo que ahora se precisa. A eso habitualmente se le llama política. Nunca una práctica ha estado tan alejada de su concepto. Lo que sea para seguir sintiendo o ponerte por fin las insignias en tu solapa y la medalla de concejal o diputado al cuello. Cuatro años más.
Como tu dices son solo brindis al sol. Falta voluntad política porque permanentemente van aplazando las propuestas para que los que causaron la crisis, al menos contribuyan a su salida.
ResponderEliminarY ahora tienen la excusa perfecta, si en época de bonanza incumplieron sus compromisos ¿como vamos a creer que ahora en periodo de crisis lo van a hacer?
Salud, República y Socialismo
Lo que está claro es que el sistema actual solo se mueve por dinero. Algunos pensamos que eso puede cambiar con la participación ciudadana y una firme voluntad democrática.
ResponderEliminarSaludos progresistas de Madrid.
Me pregunto ¿cuantos de los que se dedican actualmente a la política lo harían realmente si no cobraran los sueldos que cobran, dietas, tarjetas de crédito, viajes, pensiones aseguradas, etc, etc.?
ResponderEliminarHola amigo:
ResponderEliminarEs una pena que esto sea así y, lo más curioso es que a aquellos que nos atrevemos a proponer algo diferente nos llueven soplamocos a diestro y siniestro. Cuestionar estas formas de hacer política parece no sólo molestar a los lobos de la derecha o del socioliberalismo, sino incluso a algunos que dicen ubicarse a la izquierda del PSOE. O empezamos ya a limpiar o la mierda nos terminará comiendo.
Recibe un muy fuerte abrazote amigo.
2ª Noticia más leída de El Periódico Extremadura en este momento.
ResponderEliminarCon esta propuesta lo que se pretende es hacer un ejercicio de reflexión en voz alta al objeto de consolidar una cultura democrática de la cual la mayoría de las organizaciones políticas, partitocráticas, desafortunadamente carecen. Hemos de empezar a hacer cosas no sólo para los ciudadanos, sino con los ciudadanos. No pasa nada por que en algunas ocasiones los consultados sean los ciudadanos y los informados de sus decisiones los partidos políticos.-
Proponen que Mónica García sea candidata a la alcaldía.
El que el sistema actual cambie desde los propios partidos es muy sencillo, y ya lo he dicho: tan sencillo como que un cirujano se transplante su propio corazón.
ResponderEliminarY no os equivoquéis, esto va a peor, a pesar de muchos escándalos que surjan. Miren los boletines oficiales, y los precios de algunas adjudicaciones: una página web por 70000 euros, una campaña de publicidad radiofónica, local por 120000 euros, etc, ahí está la manteca.
No se puede limpiar nada porque no hay interés en que nada se limpie. Y muchos votantes lo que lamentan es no poder participar ellos.
ResponderEliminarMe gusta tu Post, como siempre, pero siguiendo tu reflexión en su ultimo párrafo, mantendré un silencio cómplice.
ResponderEliminarAbrazos.
Estimados amigos:
ResponderEliminar1) Como nadie ha contestado esto, podemos decir que hay gente, mucha gente que cobrando o no esta en la política porque cree en una idea.
2) Como hay una cosa, tambien esta la otra, hay gente que estar para trepar y ganar un sobresueldo o un sueldo.
3) No estoy en contra y al parecer muchos lo están de que se cobre, ajustado al mercado, ¡Ay Montilla! por desempeñar una función política.
4)Aquí tengo mis preferencia, barro para mi barrio, la tengo con aquellos que en los tiempos "jodidos" se la jugaron por defender una idea.
5) Y esto va por tí, Feluky: siempre me gustó mas el cianza o el reserva que el tinto joven. Uno es solidario no solo con su época sino con el saber. Esta fiebre por los chicos y las chicas de la selectividad que tiene el flaco nos llevará, sin duda, a Barrio Sésamo. Tomás Gómez lo está llevando bien, con la cantidad de trampas que diariamente le ponen los medios él "erre que erre": A zapaterista y leal no hay quien me gane. Bueno, muy bueno.
saludos,