Un gran negocio a la vista: Cajas de Ahorros Españolas S.A.

Que el capitalismo suele trocar las grandes catástrofes económicas en nuevas oportunidades con la que hacer grandísimos negocios es cosa sabida. La historia y el presente, está repleto de casos. Podemos pensar que la situación de las cajas es insostenible pero en realidad lo están en la medida en que también lo estén los bancos españoles. Algunas cajas de ahorros españolas tienen ratios de solvencia superiores al de los mayores bancos españoles.

El gobierno quiere dar tranquilidad a los mercados y ha decidido actuar sobre nuestro sector financiero ¿Cuántas veces hemos oído decir en los últimos tiempos a nuestros responsables políticos que teníamos el mejor sistema del mundo, el más solvente y el mas garantista? Aquí desde este blog, por esa razón, ha sonado innumerables veces la cuchufleta. Consulten.

Infinidad de veces lo hemos oído, todo para nada. Lo que realmente preocupa fuera no es nuestra deuda fiscal, sino la deuda privada y entre ella, la contraída por el sector financiero español.

Se quiere ofrecer a los mercados la suficiente tranquilidad para que sigan financiando y no nos aprieten en los mercados secundarios de la deuda. En todo esto hay algo que se oculta, y es donde realmente está el problema; La necesidad que tienen nuestros bancos y las grandes empresas para emitir deuda y obligaciones para resistir, porque si no, todos irían a la quiebra. El gobierno ha decidido acabar de una vez por todas con el “problema” de las cajas y las ofrece como chivo expiatorio para salvar a los otros, a los que si tienen accionistas. En alguna otra ocasión hablaremos del problema que las cajas suponen para todo poder centralizado, que no es como muchos pudieran pensar, un problema económico, es también un problema político, de cuotas de poder, de políticos que se enganchan a los consejos como demonios y también, en algunos casos, de cohesión territorial, pero eso, se verá en otro momento.

De lo conocido hasta ahora y a expensas de que pueda haber variaciones de última hora, cosa muy habitual en el gobierno, podemos extraer lo siguiente: Se exige a las cajas un capital básico del 10% antes de Septiembre de 2011. A los bancos privados se les pide tan solo un 8%.

La solución diseñada pasaría por una refundación encubierta de las cajas que deberían constituir bancos para dar entrada a inversores privados. Significaría esto vender literalmente parte de las cajas para obtener el capital con el que hacer frente a la directriz del gobierno. El Estado pone a disposición de las cajas una cantidad de 20.000 millones de euros, cantidad insuficiente para resolver el problema. Esta cantidad tendrá que devolverse con intereses. Las cajas que no alcancen el suficiente capital propio seran intervenidas-nacionalizadas.

Y aquí, llegamos al meollo del asunto, porque ¿alguien de este país podría decirnos en qué lugar o lugares se encuentran los propietarios de las cajas? Nadie. Las cajas son instituciones asimiladas a fundaciones. No tienen dueño, de tener dueño serían los impositores que son los que realmente han contribuido a hacerlas grandes. Su dueño no es el Estado, son reguladas por el Estado. No son propiedad ni de las comunidades autónomas, ni de los ayuntamientos que sin embargo, están representados en ellas y las gestionan. Las entidades fundadoras que en algunos casos están presentes en los consejos de administración carecen de la fuerza que tuvieron en el principio y no poseen capital.

Llegados a este punto, conviene preguntarse también ¿A quién o quiénes han de compensar el gobierno por una nacionalización? Porque en realidad, el Estado ha de indemnizar ya que no es el dueño de las cajas y porque, conviene no olvidar esto, las cajas no se encuentran en quiebra técnica. Si lo estuvieran, lo mismo ocurriría con el conjunto del sistema financiero español, incluidos los bancos privados. Con estos, que se les exige dos puntos menos, no hay intención alguna de nacionalizarlos.

A los que se les llena la boca pidiendo la nacionalización de las cajas habría que recordarles que esta intervención no supondría el crédito inmediato. Otra cosa que tampoco debe olvidarse, los miembros designados por los partidos políticos son mayoritarios en los consejos de las cajas. Estas entidades ya están nacionalizadas pero no estatalizadas y aquí surge otro problema, muchas comunidades autónomas consideran a las cajas como algo propio con lo cual, el pastel está servido.

Miren ustedes por donde, un conjunto de cajas de la periferia pueden acabar siendo un grandísimo negocio de gran alcance político y económico. Cataluña seguiría conservando su gran caja, ha sido la primera en tomar medidas con Criteria. El PNV, el único partido que atiende en todos sus movimientos a eso que los catalanes han definido como fem pais ha puesto encima de la mesa como solución la unión de todas las cajas vascas, excepto Caja Laboral Popular que es como todos sabemos una cooperativa de crédito. Pegaran una patada a los populares en Vital y unirán las tres cajas. Salvados, entre otras razones, por que esas cajas tienen el suficiente capital propio. Unicaja en Andalucía, Caja Madrid y algunas otras cajas también podrán sobrevivir. Serán salvadas sin duda.

De seguir el texto tal como lo conocimos la semana pasada, el resto de las cajas serán “ nacionalizadas”. Los defensores de la ortodoxia intervencionista aplaudirán, creyendo que el gobierno ha tomado, por fin, una decisión “socialista” y se sentirán reconfortados. En un plazo máximo de cinco años el Estado saldría del capital de las cajas, yo diría que muchísimo antes, hay que hacer negocio, y éstas serán colocadas entre aquellos que convenientemente avisados postulen por ellas.

¿Quieren los lectores ejemplos de lo que ha ocurrido en los últimos años con las empresas previamente nacionalizadas o privatizadas? Lo tienen muy fácil, Rumasa, la SER y Banesto entre otras, fueron colocadas entre personas cercanas al poder. Telefónica, BBV-Argentaria, Aldeasa, Repsol se desnacionalizaron con pingües beneficios para los amigos. De ahí salieron los Conde, Polanco, Fanjul, Villalonga, González, Blesa, etc. No hay duda, tras cada nacionalización existe una nueva oportunidad de negocio y de asegurar el futuro de algunos. Esperemos a mañana, ahí sabremos con los números en la mano mas del asunto.