Son impresionantes las imágenes que los medios nos han trasladado de los conflictos que han tenido lugar en Roma. La anestesiada Italia se rebeló con tremenda fuerza contra la cara mas negra y mafiosa del liberalismo.
Grecia, otra vez hoy, Francia y el Reino Unido con niveles inferiores de desempleo que España y todos ellos, excepto los helenos, con recortes menos pronunciados que los que se avecinan para España, han dado la respuesta en la calle.
Entre tanto, una nueva advertencia de Moodys que encarece la deuda y hace bajar la bolsa. España con los níveles mas asombrosos de paro que puede darse - dos millones de afiliados a la Seguridad Social menos que hace dos años - y con una amenaza de nuevos recortes se revela como la verdadera sociedad zombie de Europa. Estos españoles son los auténticos medio muertos y no al que se refería Umberto Eco.
Los sindicatos habían convocado para hoy, en horario laboral, concentraciones de protesta en todas las capitales de provincia. Las cifras que nos reportan las agencias hablan de la poca incidencia que las mismas han tenido.
Dos millones menos de afiliados a la Seguridad Social que hace dos años. Cuatro millones de parados y cien mil empresas menos que en 2007. Cien mil viviendas que han sido embargadas desde que comenzó la crisis y con Cáritas que ha doblado en relación con el 2009, el número de peticiones de ayuda; Seis millones de personas han necesitado ayuda por parte de esta institución según se manifiesta en sus últimos boletines. Esta mañana un obrero desesperado la ha emprendido a tiros y ha matado a cuatro personas, dos empresarios y dos empleados de banca a las que culpaba de su situación económica.
Cuál es el secreto español, el mismo secreto que dice a mercados y a sus mandados que no hay problema, que pueden seguir apretando las tuercas, que todavía hay margen, que para anestesia buena es la que los sabios embaucadores han sabido administrarnos durante estos últimos años. Cuál es el secreto.
Esta mañana me acerqué a tomar café a la capital, a la ciudad que tiene uno de los mas altos niveles de paro de Castilla y León, más del 30%. En la barra del Fontana hay como siempre gran cantidad de diarios. Allí y bien ordenados, se encuentran El País, ABC, El Mundo, La Razón, el Marca, el AS y los tres periódico locales. Mas de veinte ejemplares que leer. Hay de sobra, para nada hace falta pelearse sobre este o aquel ejemplar, salvo que usted quiera leer algún periódico deportivo, si esa es su elección tendrá problemas. Los tres de siempre en un extremo de la barra hablan de eso, de lo mismo, son grandes entendidos en los entresijos futboleros. Mas cerca de donde me encuentro, este otro grupo también comenta sobre la misma materia. La calle está igual que siempre; Grupos de hombres y mujeres emplean su tiempo gastando las suelas de los zapatos entre las piedras centenarias. Lo que no habrán visto las piedras de esta ciudad.
En el banco de resistencia de materiales que es la sociedad española se nos ofrece datos sorprendentes sobre la resistencia, ductilidad, elasticidad y maleabilidad del español. Esos mismos a los que los intelectuales orgánicos de ahora, tertulianos de uno y otro signo se empeñan en neutralizar. Los que se esmeran a conciencia en ganarse el sueldo que le pagan tratan de cumplir su función: Servir a quienes le pagan, hablan y hablan pero ya la gente no les escucha solo preparan cada noche, en contacto con la almohada, el cuchillo con el que cortará las cuerdas en el único acto de rebeldía que les queda: El voto.
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Grecia, otra vez hoy, Francia y el Reino Unido con niveles inferiores de desempleo que España y todos ellos, excepto los helenos, con recortes menos pronunciados que los que se avecinan para España, han dado la respuesta en la calle.
Entre tanto, una nueva advertencia de Moodys que encarece la deuda y hace bajar la bolsa. España con los níveles mas asombrosos de paro que puede darse - dos millones de afiliados a la Seguridad Social menos que hace dos años - y con una amenaza de nuevos recortes se revela como la verdadera sociedad zombie de Europa. Estos españoles son los auténticos medio muertos y no al que se refería Umberto Eco.
Los sindicatos habían convocado para hoy, en horario laboral, concentraciones de protesta en todas las capitales de provincia. Las cifras que nos reportan las agencias hablan de la poca incidencia que las mismas han tenido.
Dos millones menos de afiliados a la Seguridad Social que hace dos años. Cuatro millones de parados y cien mil empresas menos que en 2007. Cien mil viviendas que han sido embargadas desde que comenzó la crisis y con Cáritas que ha doblado en relación con el 2009, el número de peticiones de ayuda; Seis millones de personas han necesitado ayuda por parte de esta institución según se manifiesta en sus últimos boletines. Esta mañana un obrero desesperado la ha emprendido a tiros y ha matado a cuatro personas, dos empresarios y dos empleados de banca a las que culpaba de su situación económica.
Cuál es el secreto español, el mismo secreto que dice a mercados y a sus mandados que no hay problema, que pueden seguir apretando las tuercas, que todavía hay margen, que para anestesia buena es la que los sabios embaucadores han sabido administrarnos durante estos últimos años. Cuál es el secreto.
Esta mañana me acerqué a tomar café a la capital, a la ciudad que tiene uno de los mas altos niveles de paro de Castilla y León, más del 30%. En la barra del Fontana hay como siempre gran cantidad de diarios. Allí y bien ordenados, se encuentran El País, ABC, El Mundo, La Razón, el Marca, el AS y los tres periódico locales. Mas de veinte ejemplares que leer. Hay de sobra, para nada hace falta pelearse sobre este o aquel ejemplar, salvo que usted quiera leer algún periódico deportivo, si esa es su elección tendrá problemas. Los tres de siempre en un extremo de la barra hablan de eso, de lo mismo, son grandes entendidos en los entresijos futboleros. Mas cerca de donde me encuentro, este otro grupo también comenta sobre la misma materia. La calle está igual que siempre; Grupos de hombres y mujeres emplean su tiempo gastando las suelas de los zapatos entre las piedras centenarias. Lo que no habrán visto las piedras de esta ciudad.
En el banco de resistencia de materiales que es la sociedad española se nos ofrece datos sorprendentes sobre la resistencia, ductilidad, elasticidad y maleabilidad del español. Esos mismos a los que los intelectuales orgánicos de ahora, tertulianos de uno y otro signo se empeñan en neutralizar. Los que se esmeran a conciencia en ganarse el sueldo que le pagan tratan de cumplir su función: Servir a quienes le pagan, hablan y hablan pero ya la gente no les escucha solo preparan cada noche, en contacto con la almohada, el cuchillo con el que cortará las cuerdas en el único acto de rebeldía que les queda: El voto.
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