jueves, 25 de marzo de 2010

El arte de escurrir el bulto ante el electorado, la política de pasitos cortos y como dar la vuelta a un calcetín sudado (II). (Reflexiones)


Estamos empeñados hasta las cejas, y les aseguro, que no es ninguna gracieta en relación con ese atributo tan significativo del presidente del gobierno. Nada de eso.

Cuando se nos ofrecen datos en relación con la marcha de la economía se suele hacer en términos de porcentajes, ratios etc. El inconveniente de este modo de comunicación, habitual por otra parte, es que no suele reflejar de modo adecuado la realidad. El lector no adquiere plena conciencia de la dimensión del hecho que se comunica, su trascendencia o incluso su gravedad.

Se ha dicho que el producto interior bruto de España ha caído en 2009 en relación con el 2008 pero son los menos los que saben que en valor del PIB en 2009 fue de un billón ciento dieciocho mil millones de euros (1.118.000 millones de euros).

Lo mismo ocurre si se dice que el déficit público esta situado en un 11,2% pero el escuchante o el lector no tiene a mano los datos concretos.

A partir de los datos del Ministerio de Hacienda he elaborado este cuadro en el que se reflejan algunos indicadores de la contabilidad nacional. He obviado otros que son de interés como por ejemplo, las cuentas de la Seguridad Social, ya que haría muy voluminosa esta entrada, de la que hay que destacar que siguen produciendo superavit. Sobre esta última recalcar algo que me parece de interés. Recientemente el Secretario de Estado de la Seguridad Social dispuso que el 90% del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, casi 70.000 millones de euros, fuese colocado en su integridad en la deuda española, no se sabe ni a que tipo de interés ni en que tipo de títulos. Lo habitual hasta ahora era colocar el 70% y el resto en deuda y valores extranjeros.

Las explicaciones e interpretaciones huelgan, la realidad es que de un simple vistazo se nos antoja que va a ser muy difícil reducir el creciente déficit. También reseñar la importante caída de la recaudación del impuesto de sociedades y del IVA y al mismo tiempo reflexionar sobre si la subida del IVA propuesta será suficiente para reequilibrar las deudas del estado.

Puede ser divertido jugar a ser responsable de hacienda y tratar de reequilibrar lo que a mi me parece tarea imposible de no recortarse el gasto. Supongo que todo se andará, no parece ser que haya otra solución. ¿De dónde? Ahí está el cascabel.

El tamaño es un tanto reducido pero espero que se vea bien. De todos modos quien quiera ampliar estos datos puede recurrir a la siguiente página del Ministerio de Hacienda en el Cap.6 donde podrá analizar los datos.


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