Atender a lo prioritario. El problema está en la falta de crédito

Ahora el problema no está en las “rígidas condiciones laborales y el "despido caro” La propuesta del PSOE a nadie gusta, a unos por exceso y a otros por defecto. Algunos, como Arenas, la critican sin decir cual es la propuesta de reforma que el Partido Popular tiene en su cartera.

En el otro barrio, en el de los “técnicos” pasa lo mismo. Todos aquellos que hacen unos meses hablaban de lo imprescindible de la reforma laboral como único instrumento para crear empleo, pasan ahora del tema. Es más, todos los que cacareaban la necesidad de los cambios estiman que una vez aprobada no va a crear empleo. El último informe de COTEC es una andanada en la línea de flotación de los desreguladores laborales. De eso nos ocuparemos en otra entrada.

El déficit público no es el monstruo que se nos quiso vender desde la derecha. Ahí el problema es de caja, lo que falla no radica en el gasto, si no en la falta de ingresos suficientes por la caída de la actividad empresarial, el empleo y el consumo, por ese orden.

Luego ¿Dónde están los problemas de la economía española? Los problemas se encuentran en la falta de crédito que es lo que origina en gran parte el cierre de empresas. No hay crédito porque las deudas de particulares y sobre todo de los bancos con el exterior es muy voluminosa. Al no tener dinero los bancos toman prestado al BCE; 85.000 millones de euros. Los bancos españoles tienen también que devolver 412.000 millones de euros en los tres próximos años a tenedores de papel. Han de devolver ese dinero en el marco de una morosidad del negocio inmobiliario que afecta al 10% del crédito otorgado, mientras que al resto de empresas se sitúa en el 4%. Hay que tener en cuenta que lo prestado por el sistema financiero español al sector inmobiliario es de 402.000 millones de euros concedidos tan solo a las empresas de construcción y promoción inmobiliaria para la vivienda residencial. Esto genera a su vez un problema añadido; Las entidades de crédito han de provisionar y aumentar sus reservas de modo constante en la medida que se viene produciendo impagos. Del total, se estima que los créditos problemáticos hasta Marzo de 2010 ascienden a 165.000 millones de euros.

Mas de 100.000 viviendas se encuentran ya en poder de los bancos. Sin embargo, los bancos se resisten a bajar los precios. Si estas viviendas saliesen a precios de mercado los bancos podrían recuperar no las ganancias que tenían previstas pero si contribuirían a colocar viviendas mas baratas que seguramente podrían ser compradas por un sector de la población que podría permitírselo. ¿Por qué no lo hacen? Por que el Banco de España solo le pide que provisionen conforme a una serie de plazos en los impagos también, por que se les permite mantener en el balance a precios tasados y no de mercado. El problema de la falta de crédito que viene estrangulando a la economía española surge de una tolerancia excesiva al sector financiero. Si muchos bancos y cajas de ahorros pusiesen negro sobre blanco sus problemas reales, tendrían que ser absorbidos por otras entidades, por mucho que los tests de estrés indiquen solvencia. No todos son el Santander y el BBVA. Los bancos de sus beneficios, tienen que dedicar grandes cantidades a las provisiones, a pagar sus facturas exteriores y al pago de dividendo, un frente este que no les conviene descuidar, una pérdida de valor bursátil supondría ser una presa fácil en manos de inversores no deseables.

Las vías para la solución de la mala situción económica no pasa por una reforma laboral que nada soluciona, un recorte de derechos sociales que no salvan los presupuestos y que son pecata minuta. Estas medidas son como la cabeza de Juan Bautista ofrecida a la Salomé de los mercados, es la ofrenda presentada para que no sigan encareciendo nuestro recurso al crédito. Siguiendo con el Antiguo Testamento somos un Isaac ofrecido en sacrificio sin la esperanza de oir la voz que detenga el puñal.

El problema no es el Estado del Bienestar, el problema es la exposición del sector financiero a la construcción. La necesidad constante de liquidez de estas instituciones para hacer frente a sus créditos exteriores y la morosidad galopante de ciudadanos, constructoras e inmobiliarias es la que nos mete en la dinámica infernal de una crisis que se realimenta.

Metan mano ustedes a quienes tienen nuestro dinero, a quienes deberían de crear riqueza y empleo y no a nosotros. Esa es la prueba del nueve para saber si una política es de izquierda o de derecha. El 15% de descenso de la vivienda nueva no es suficiente, si bajase mas podría empezar a solucionarse el principal problema de la economía española; La falta de crédito.